.en la cuerda floja, recuerda, siempre en la cuerda floja.

De batidas, batallas y luces.




Éxtasis puro, heroína. Llamarlo vicio sería ciertamente un eufemismo. Rozar sus labios y sumirse en una nube, una puta nube esponjosa y muy dulce. Ver esos ojos y morirse de ganas, de su curva con la mía y que ni el más rápido de los fotones pueda colarse. Resbalar sobre él y trepar. Enredarse entre sus brazos y sentirse amurallada. Escuchar su voz suave y que la sangre corra más rápido por mi cuerpo, que por un campo de batalla en guerra mundial. Notarle y arder. Besarle y que el aire se corte. Buscarlo constantemente al otro lado y no parar, no poder parar ni un mísero segundo.

"Es ese que con su sonrisa, al igual que la mariposa con sus alas, batía el mundo a su paso."